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El Ourika, situado a sólo 30 km de Marrakech, es uno de los destinos más encantadores de Marruecos, famoso por su belleza natural, sus verdes paisajes y sus tradiciones bereberes aún vivas. Si está en Marrakech y quiere descansar del ajetreo de la ciudad, una excursión al Valle de Ourika es la opción ideal para sumergirse en la tranquilidad de la naturaleza, explorar pueblos tradicionales y descubrir vistas impresionantes.
La excursión al Valle de Ourika es perfecta para quienes deseen vivir una experiencia de inmersión en el corazón de la cordillera del Atlas, famosa por sus pintorescos pueblos bereberes, sus ríos cristalinos y su exuberante vegetación.
La excursión sale a primera hora de la mañana de su hotel en Marrakech y le lleva a través de un paisaje impresionante, pasando por pueblos bereberes y verdes extensiones.
Duración del viaje: 1 hora y 30 minutos aproximadamente.
Ruta panorámica: Durante el trayecto, atravesará una serie de paisajes montañosos y pueblos tradicionales, con espléndidas vistas de los valles y montañas circundantes.
Una vez en el valle, le recibirá un espectacular paisaje de tierras cultivadas, olivares, huertos de cítricos y el río Ourika fluyendo por el valle. La belleza natural de la región le dejará sin palabras.
Visitar los pueblos bereberes
El valle del Ourika está habitado por tribus bereberes que viven en aldeas tradicionales de casas de adobe. Tendrá la oportunidad de pasear por los pueblos locales y conocer a sus habitantes, que le recibirán con su hospitalidad. Podrá observar su estilo de vida, que ha permanecido prácticamente inalterado a lo largo de los siglos.
Paseo por el río Ourika
Una de las actividades más agradables del valle es pasear junto al río Ourika. Podrá caminar por los senderos que siguen el curso del río, disfrutando del frescor del agua y de las vistas de los paisajes montañosos circundantes. Por el camino, encontrará pequeñas cascadas y piscinas naturales donde podrá parar a refrescarse.
Las cascadas de Setti Fatma
Las cataratas de Setti Fatma son una de las principales atracciones del valle. Situadas a unos 5 km del pueblo de Setti Fatma, estas cascadas son un verdadero espectáculo de la naturaleza. Tras un corto paseo por el paisaje montañoso, llegará a esta serie de cascadas que ofrecen una vista extraordinaria. Podrá hacer fotos increíbles y quizás darse un refrescante chapuzón en las piscinas naturales que forman las cascadas.
Durante la excursión, tendrá la oportunidad de disfrutar de un almuerzo tradicional en uno de los restaurantes locales del valle. Disfrutará de platos típicos marroquíes, como cuscús con carne y verduras, tagine de pollo con limón y aceitunas, o el famoso caldo bereber. Los platos se preparan con ingredientes frescos del valle y ofrecen una auténtica experiencia gastronómica marroquí.
Además de visitar los pueblos y las cascadas, el valle del Ourika ofrece otras oportunidades para explorar la naturaleza circundante y vivir una experiencia única.
1. Senderismo en el Atlas
Si le gusta el senderismo, el valle ofrece numerosas rutas que se adentran en la cordillera del Atlas. Podrá realizar excursiones guiadas para descubrir la fauna y la flora locales mientras disfruta de la paz y la tranquilidad que caracterizan esta zona.
2. Visita a la fábrica de aceite de argán
El valle del Ourika también es famoso por la producción de aceite de argán, que se utiliza tanto en la cocina como en productos cosméticos. Visitará una de las cooperativas locales donde se produce el aceite de argán, conocerá el proceso de producción y comprará productos frescos directamente al productor.
El valle del Ourika es uno de los destinos naturales más cercanos a Marrakech, y constituye una opción ideal para quienes deseen una excursión que combine naturaleza, cultura y tradición. En sólo unas horas, tendrá la oportunidad de descubrir la vida rural de Marruecos, caminar por paisajes montañosos y admirar la belleza de cascadas y pueblos bereberes. Si desea pasar un día de serenidad y belleza natural, la excursión al valle del Ourika es una experiencia que no debe perderse.